Siempre he odiado mi adicción a los juegos, inclusive a aquellos en las que llevo las de perder, y en realidad no que sea algo patológico ni nada por el estilo pero desde que tengo uso de razón mi hermano siempre ha sido superior en los videojuegos que yo, así que me he esforzado en grande para superar mi poca destreza y mis bajo desempeño en los "records" de dichos videojuegos, es ahy donde nace mi obsecado objetivo de nunca dejarme vencer por mi hermano ni por nadie, es decir, ser el mejor jegador posible.
Son las 11:38 y la verdad no parece que la noche vaya a ser corta mi hermano me recomendo un nuevo juego para el iPod y por la cuiriosodad lo descarge, en un principio pence que seria algo realmente pasajero, ya que en la actualidad y por fortuna para mi bolsillo y mis actividades tanto escolares como laborales, cada vez y de manera más marcada, nos gustan diferentes tipos de juegos, sin embargo y casi inmediatamente me enganche a un juego de lo más simple y dada la similitud con los tan famosos y hasta pasados de moda como los juegos de "Age Of Empire".
Es aqui donde uno cae en cuenta de la finalidad de este tipo de juegos, no es tanto para matar el tiempo, sino que pareciera que los hacen para no dejarlos de jugar. No se como es que se puede apartar de un comprtamiento sano y estimulante hasta el punto de anciedad y frustración pero en definitiva el comportamiento de autodestrucción é iracionalidad abunda y cada vez es más generalizado en todas las sociedades "post-modernas" y en las que reina el consumismo.
Anda Veyaco, lo que comentas es para pensar, recuerdo aquellos juegos (justamente de atari) en que la pasabas muy bien y que sin pesar alguno podías detenerte y hacer otras actividades, es cierto que hoy en día los juegos son super adictivos, pero no había caido en la reflexión de que quizá ese es el fin, de que el usuario no deje de jugarlo. Qué fuerte.
ResponderEliminarLo curioso, solo por llamarlo de un modo, es que sigo bien clavado en ese juego.
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